viernes, noviembre 04, 2005

Viajes

Dentro de unas pocas horas me voy a Dublin a pasar el fin de semana. Por supuesto, y aunque lleve una temporada con una inmejorable salud, me he empezado a encontrar un poco mal esta mañana, con esta sensacion de neblina mental con la que empiezan los catarros y las gripes.

No obstante, si este pais esta preparado para algo es para afrontar estas pequeñas molestias. Si vas a cualquier farmacia (bueno, farmacia por decir algo, porque una caracteristica de los comercios ingleses es la diversificacion absurda: todo comercio que ha empezado dedicandose a ciertos productos acaba expandiendo su oferta incluyendo al cabo del tiempo, de todo. Por ejemplo, Mark’s and Spencer, originalmente una marca de supermercados, ahora vende ropa y accesorios en sus tiendas mas grandes. Boots, originariamente una cadena de farmacias, vende tambien bocadillos, bebidas y cosmeticos. A veces te da la impresion de que da igual en la tienda que te metas, que vas a poder comprar leche, calcetines o bombillas por igual. Por cierto esto era un parentesis) encontraras un impresionante surtido de medicinas contra el catarro y vitaminas con todas las letras del abecedario. Tampoco faltan ginseng, aceite de higado y demas productos vudu. Resulta ridiculo mirar la seccion de vitaminas y antigripales de estas tiendas, tienen 30 tamaños, formatos y dosis diferentes de cada cosa y por lo menos 5 o 6 marcas diferentes. Realmente puedes visualizar a una madre diciendo “bueno, llevan toda la semana comiendo hamburguesas pero ahora les hincho con 1000mg de multivitaminas y todo arreglado”. El tema de la comida en este pais es preocupante, pero tambien tiene que ver el hecho de que la sanidad publica inglesa es equivalente a la que podria haber tenido Genghis Khan, lo que provoca que antes de ir al medico lo que diga el farmaceutico va a misa. Podria reproducir un par de anecdotas que me ha contado una amiga que ha trabajado de enfermera aqui, pero se pueden resumir en su terrible frase “si estas enfermo el ultimo sitio al que quieres ir es un hospital”. Pero no hay nada que temer, la seccion de medicinas y vitaminas de la ferreteria mas cercana funciona a la perfeccion, de hecho ya me encuentro mejor.

Ultimamente ha habido bastante movimiento en mi piso. Se ha ido alguna gente, ha venido alguna nueva, que a su vez ha ido dejando paso a nuevas generaciones. A mi me parece perfecto, es una manera de conocer gente sin salir de casa que no tiene nada que ver con internet.

Una de las mejores cosas de Londres es precisamente esto, el conocer mucha gente de todas partes. En cualquier folleto de agencia de viajes dice que Londres es una ciudad cosmopolita y multicultural, palabras ambas que cada dia significan menos pero aun contienen algo de verdad aqui. Supongo que gran parte de las cosas que estoy diciendo son obvias y sobradamente conocidas para muchos, pero esto es quiza uno de los mayores cambios que uno experimenta al principio viniendo de España. Por nuestra experiencia esperamos llegar a Inglaterra y conocer y convivir con ingleses. Pues no! De hecho a veces uno se pregunta donde se meten. Practicamente los unicos con los que tengo trato son mis compañeros de trabajo (con algunas honrosas excepciones, normalmente parejas de amigos o amigas), por lo demas es mucho mas facil tener un circulo de amigos polacos, españoles o japoneses que ingleses. Supongo que tendra mucho que ver con que los extranjeros llegamos aqui perdidos y la gente perdida tiende a unirse, pero el caso es que cuando uno cuenta las nacionalidades de sus amigos en general se pierde. Esto tiene alguna consecuencia negativa, por ejemplo cabe destacar la verguenza a la hora de reconocer que no sabemos donde esta tal ciudad o incluso tal pais, y la imposibilidad fisica de recordar o pronunciar ciertos nombres. Tambien esta el problema del numero de besos, pero este es solventable dando la mano a todo el mundo o alegando nuestro fogoso caracter latino si la chica en cuestion se aparta (suele colar si lo dices sin reirte, nunca subestimeis el poder de los topicos sobre españoles).

Estos son pequeños problemas pero en general las ventajas los superan ampliamente. En cierto modo, cada persona que conoces es un pequeño viaje en si misma. A veces es un viaje a una infancia en un pais comunista, a veces a un palacio pakistani y a veces a una vida de trabajo duro y pocas recompensas. Otras veces simplemente es una visita rapida a multitud de tiendas de ropa cara o una repeticion de topicos y lugares comunes, pero casi siempre vale la pena. Es cierto que siempre hay un cierto peligro de generalizar, de adquirir prejuicios o incluso de algun tipo de racismo. No todo el mundo que se conoce en unas circunstancias tan particulares como vivir en una ciudad como Londres es un buen ejemplo de su pais, para lo bueno o para lo malo, pero en general considero que ahora tengo una vision de las cosas mucho mas de “primera mano” que cuando vivia en España.

Y hablando de viajes, me tengo que ir a uno ahora. Ya os contare si Irlanda se parece tanto a Galicia como dicen, si es cierto que solo hay vacas e iglesias y de si todo el mundo bebe tanto como mi compañero de piso irlandes y sus amigos (es algo casi heroico, recordare toda mi vida el dia que me desperte y estaban en la cocina con una fila de unas 4 botellas de whisky y 30 cervezas vacias, todas consumidas en la misma noche y por dos personas, eso si su estado era lamentable). En cualquier caso espero que el que nos lleve en avion vaya sobrio, o al menos sea una vaca.