domingo, marzo 30, 2008

De vuelta

Hay bastantes razones por las que no he escrito en tanto tiempo, la vagancia no siendo una de las menores, pero como las demas ya las he usado como excusa alguna vez voy a hablar solo de una. Durante los ultimos meses me he enganchado a la que ahora considero la mejor serie de television que he visto nunca: The Sopranos. La he visto entera, 7 temporadas, 1999 a 2007 condensados en unas cuantas noches durmiendo menos de lo que deberia, asi que el blog ha sufrido. Si no la habeis visto, un resumen muy rapido seria que va sobre la vida de Tony Soprano en sus dos familias: una, como esposo y padre de dos ninhos, la otra, como jefe de la mafia de New Jersey. No es una serie como otras miles que se han puesto de moda ahora. No se basa en misterios continuos y en cliffhangers desesperantes. Es cine, y cine del bueno, como si alguien fuera capaz de mantener la calidad del Padrino en casi 90 capitulos de una hora. Podria extenderme en alabanzas pero creo que si la habeis visto ya lo sabeis y si no, a que esperais, ir corriendo!

Esto me ha hecho pensar en como es todo este tema del cine, la "calidad", lo que es "bueno" y lo que es "malo". Casi todos tenemos un criterio de lo que es bueno y lo que no, y tenemos una cola gigante de peliculas por ver, seleccionadas con esos criterios. Seguramente entre ellas hay algunos clasicos, algo de cine europeo de autor, la que gano el premio de noseque, etc. etc. El caso es que no se vosotros pero a la hora de la verdad, de elegir la pelicula, alguien como Bruce Willis sigue teniendo bastantes mas posibilidades que Fellini de acabar en pantalla.

Yo reconozco que tengo debilidad por algunos generos como por ejemplo la ciencia ficcion. Si un zurullo maloliente llevara una etiqueta de Star Trek (o el simbolo ese que llevan en los trajes), seguramente me lo comeria y despues me quejaria de lo mal que sabe (es la sensacion que tuve al ver Star Trek: Nemesis). A veces veo peliculas que solo les falta llevar una pegatina que diga soy un bodrio, y el 90% de las veces son eso, un bodrio. Y por supuesto eso no evita que vea la segunda parte. Lo peor de todo es que cuando reuno fuerzas y veo una de las que se "suponen buenas", la mayoria de las veces me gusta bastante (y las recuerdo durante mas tiempo y me hacen pensar mas y todas las cosas que se supone que una buena obra de arte debe conseguir).

Hay alguna gente que normalmente hace peliculas que "apetece ver" y son "buenas" al mismo tiempo, como Clint Eastwood o Jean Claude Van Damme, pero son los menos. Realmente la mayoria de las cosas buenas necesitan ser un toston? Nos hemos vuelto unos vagos intelectuales? o mejor dicho, me he vuelto yo un vago intelectual? Y la pregunta mas siniestra de todas... y si mis gustos funcionan bien y Bruce Willis es uno de los artistas mas infravalorados de la historia?

Reflexiones de baratillo aparte, es cierto que a veces, pocas, una obra lo consigue todo: tiene exito, emociona, engancha y tiene contenido para quitar algo de oxido cerebral. No son muchas, pero solo por encontrar una vale la pena todo el tiempo buscando. Eso si, cuando encontreis una que requiere 80 horas para verla, iros despidiendo del blog por una temporada.